lunes, 31 de agosto de 2009

FELIZ DIA DEL BLOG!!!

Hoy 31 de agosto es el Día internacional del Blog o BlogDay, el cual fue creado para que los blogueros conozcan y promuevan los blogs o “cuadernos de bitácora on line” de otros países y de otros centros de interés, por lo que se propone que cada blogger elija cinco nuevos blogs que consideren interesantes y los comente. Elijo recomendar los siguientes:
http://prenper.blogspot.com/ es el blog de mi amiga Mona quien me introdujo en este nuevo espacio de comunicación, primero fui su seguidora y al querer comentar un tema, termine creando un blog, y ahora nos seguimos mutuamente.
http://www.criticadigital.com/lapeleadora/ Es un blog que me divierte porque es como una terapia para exorcizar el mal humor a través del camorreo verbal justo y bien fundamentado. Escribe una joven que no se queda callada cuando algo o alguien llegan a rebasar su paciencia y estalla cual increíble Hulk ya sea por errores ortográficos de sus seguidores así como por los disgustos que le provocan los ineptos, pesados o inadaptados que se le cruzan en su camino.
http://laboluda.wordpress.com/ En este blog, que es el opuesto al anterior, se representa la furia contenida de todos los que se callan para vivir civilizadamente bien, lo que transforma a las victimas de injusticias e incoherencias en ciudadanos “boludos: políticamente correctos”, pero la revolución pasa por dentro y se transluce en los relatos, los cuales representan exactamente lo que muchas veces las viñetas de humor dirían con signos varios que se traducen en insultos pero que aquí están escritos de manera “políticamente correcta”
http://missotrasyyo.blogspot.com/ Este es un blog recién estrenado, pero lo recomiendo porque empezó como una auto entrevista de una joven que tiene múltiples personalidades y habla a través de la multitud de mujeres que llevamos dentro y a veces nos hacen sentir y ver como contradictorias. En esta presentación, es la bloggera la que parece ser entrevistada por su conciencia, y a veces no hay peor cuestionador y verdugo que uno mismo.
http://hablemosmaldeloshombres.blogspot.com/ Si los hombres deseaban estar en la mente de una mujer para poder llegar a comprenderla o si querían infiltrarse en medio de una conversación de mujeres para saber qué confidencia hacemos sobre ellos, entonces este es el blog recomendado, una manera de curiosear por el complejo mundo femenino, de manera virtual, como escuchando detrás de una puerta imaginaria.
http://almacendesecretos.blogspot.com/ Es una serie de cuentos que se van concatenando para armar la historia de vida de la bloggera, compleja y fragmentada, dura y difícil como la vida misma.

sábado, 29 de agosto de 2009

Extranjeros en su propia tierra

Dedicado a mi primo DO (que desde ayer volvió a Punta Cana donde estuvo viviendo por casi 9 años) y a mi viejo Raúl (que hace un mes volvió a Brasil donde vive desde hace 21 años)

¿No sería una contradicción hablar de "extranjeros nativos", cómo se puede ser extranjero en la propia tierra? La idea no parece imposible de imaginar si se tiene en cuenta que podemos sentirnos extraños en nuestra propia familia, dentro de la misma sociedad donde nacimos o crecimos o por lenguajes o modas que nos resultan ajenas. Por ejemplo, cuando las nuevas generaciones se sienten “nativas” porque no tuvieron que vivir el paso del lenguaje de “la ciudad letrada al mundo de las pantallas”, mientras que las generaciones anteriores se sienten “extranjeros digitales” porque tienen que aprender un “idioma” nuevo que no se llegará a hablar bien, puesto que son códigos aprehendidos en un contexto diferente.
El antropólogo Néstor Canclini escribió sobre “extranjerías metafóricas”, desde su propia experiencia, ya que su vida se repartió entre México y Argentina, lo que le permitió comprender que los desgarramientos muchas veces se viven cuando una persona trata de reinsertarse en su país natal, tras muchos años de vivir afuera, y comprende que ya no se siente parte de la nacionalidad o la idiosincrasia de la cultura que tanto extrañó desde el desarraigo. Por lo tanto las personas también se convierten en extranjeros al sentirse como extraños ante lo conocido o en otras situaciones muy bien detalladas en su libro “extranjeros en la tecnología y en la cultura”, como por ejemplo: “con la necesidad o el proyecto de vivir en otros países, o con el regreso al propio y descubrir cómo han cambiado las cosas, así como con la distancia entre el país soñado y el real, con la segregación y la violencia que excluyen y hacen sentir extraño en el lugar natal, o con cierta disconformidad ante las variaciones de un entorno conocido”. Así, una persona que se cruza con un grupo de tribus urbanas notará que mutuamente se observan y se alejan como sintiendo la mutua exclusión social de lo “raro” que es visto como foráneo: “estas formas de sentirse o de hacer sentir extranjeros a algunos en la propia ciudad es porque no se eliminan las fronteras, sino que se multiplican, son móviles y permeables pero a veces también más agresivas. Entonces, tenemos que volver a preguntarnos qué significa ser extranjero. Es preciso analizar cómo funcionan las extranjerías situacionales, que a veces tienen que ver no sólo con aquel que está lejos o del otro lado de la frontera, sino también con aquel que está cerca, que es "otro" porque desafía nuestros modos de percepción y significación”.
Yendo más allá de lo teórico, desde mi propia experiencia tuve la oportunidad de recibir a dos familiares muy cercanos que viven en el exterior y luego de una breve estadía aquí, retornaron a su nueva patria. En ese tiempo, uno se convierte en guía de turismo político y social, en una especie de traductor de situaciones que no se sabían tan cambiadas hasta que caen en el microscopio del “extranjero nativo”. Entre muchas observaciones, remarcaron el mal humor reinante en los cordobeses; la inseguridad que a ellos los hacían ver como ingenuos ante situaciones que a nosotros nos hacían parecer paranoicos cuando solo somos precavidos; el sufrir la transición de la “curiosidad” por el venido de afuera para saber como nos ven y cómo les fue, para luego no poder reinsertarlos laboralmente por el excluyente limite de edad para el ingreso laboral.
Ellos regresaron a las cálidas tierras adoptivas de mar y sol, llevando un anecdotario nacional de políticos corruptos, presidenta con botox discursivo, extrema pobreza camuflada con cifras estadísticas dibujadas y continuos paros institucionalizados o legalizados bajo el nombre de “asambleas” que paralizaron la actividad y la educación en la ciudad.
Aunque ahora vuelvan a ser etiquetados como extranjeros bajo rótulo de “el argentino”, seguramente se sentirán mejor sintiendo la nostalgia de su tierra querida y lejana desde afuera, pero sin sufrir la lejanía que muchas veces se vive fronteras adentro, donde no pesa tanto la comparación de culturas distintas como la idea de que nuestra tierra y nuestra gente perdió el esplendor, la fuerza y el espíritu que quedaron en la frontera del pasado, y no hay pasaporte que lleve hacia allá.

jueves, 27 de agosto de 2009

Adiós al avioncito


Los chicos de hoy parecen llegar al mundo ya programados y acelerados, como si en vez de cordón umbilical vinieran conectados con banda ancha; tal vez esto sea por los estímulos que reciben de Internet, videojuegos, cuentos interactivos, celulares, etc. Todo esto convirtió a los niños en hábiles manipuladores no sólo de las tecnologías sino también de los adultos, y los padres terminan por ser abogados que “litigan” con sus hijos a la hora de exigir un mínimo de obediencia. Por eso ahora es el ingenio el que puede devolverles a los papás el derecho a ser obedecidos, como fue el caso de un jefe de familia que, ante la negativa a probar bocado, optó por ser creativo creando personajes sobre los alimentos. Si los niños ya le devuelven una mirada lastimera ante la "cuchara-avioncito”, denegando su aterrizaje, es hora de cambiar la estrategia. Gracias a esta idea, a Mafalda le podría haber resultado menos tortuosa la tarea de tomar la sopa.

lunes, 24 de agosto de 2009

Cazacarteles



Quien no ha visto en la vía publica algún texto escrito en una pizarra, pancarta, cartel, señalización o pared en donde algo nos sorprende y nos obliga a volver a mirar, ya sea por lo ingenioso del texto, por su bestialidad ortográfica, por su obviedad o por lo insólito que se lee en ellos. Y qué hacemos luego de sonreír y comentarlo con otros? generalmente lo olvidamos. Sin embargo hay un grupo de 3 amigos publicitarios argentinos que comenzaron a coleccionar cuanto texto, ícono o dibujo bizarro se les cruzó en el camino primero como hobby para luego transformarlo en “Proyecto cartele” -así como se lee, con la simpática faltante de la "S"- que incluye página web con más de 20.000 imágenes (donde los “cazacartele” pueden participar enviando fotos), 4 libros (Cartele, Proyecto Cartele, Entrada Boca de Lobo y Liquidación Total por Saqueo) y exposiciones. Las imágenes están clasificadas en distintas categorías como “inexplicables”, “insultos”, “nombres, etc. Si un extranjero quiere aprender nuestro idioma, tendría que empezar por la idiosincrasia humorística con la que nos comunicamos, usando al lenguaje como bufón. Pase y ría ...

jueves, 20 de agosto de 2009

Una ardilla "figuretti"


Bajo las cómicas frases de “Me pareció haber visto una linda ardillita” o “te metieron la ardilla” está circulando por internet una simpática noticia surgida de una ardilla curiosa que se “coló” en la foto de una pareja de turistas, al estilo de un figuretti animal, cuando la cámara fotográfica había quedado en automático sobre unas rocas, parece ser que el sonido del temporizador se tradujo en una invitación en el lenguaje ardillezco. Quizá ahora ésta es la ardillita más famosa junto a la de la Era del Hielo, ambas comparten un carisma que no precisa de palabras y, en este último caso, ni siquiera de movimientos. Lo increíble de todo esto es que su fama se extendió por internet como reguero de pólvora y ya hay sitios como The Squirrelizer que permiten introducir la foto de la ardilla en cualquier fotografía e incluso ya tiene su propia página en Facebook. La curiosidad mató al gato pero hizo famosa a la ardilla.

Inteligencia artificial a la cordobesa


Desde ayer en Córdoba tenemos, además de un edificio inteligente, nuevas paradas de colectivo inteligentes, parece que la inteligencia artificial va modernizando el perfil de una ciudad que siempre se caracterizó por ser “La Docta” precisamente por las inteligencias no artificiales que salían de sus universidades. Ahora bien, tendremos que “reeducar” a los ciudadanos que hasta el momento sólo han logrado que sea obligatorio enrejar desde los espejos parabólicos de las esquinas hasta las ventanas de los colectivos, para así poder preservar el patrimonio urbanístico del vandalismo. Porque “civilización y barbarie” sólo pueden convivir en el título del libro.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Una vaca "contenida"


Lo que muestra la foto que subieron en www.canaldoceblog.com.ar parece ser una nueva forma de transportar ganado vacuno de manera más “contenida”, también cuesta imaginar que la pobre ya no cabía en el galponcito o en la quintita del fondo de una casa y por eso contrataron un contenedor para llevársela. Así como la realidad a veces supera a la ficción, en esa imagen pareciera que la realidad supera además a aquel artista ecológico que también asoció una vaca con un contenedor al pintar los recipientes como si fueran de cuero vacuno para concientizar sobre el reciclaje de la basura. A lo mejor nuestro intendente cambie los zootropos por “vacatropos”, como una alternativa de recolección y un apoyo camuflado a los pobres tamberos que vieron sus negocios tirados al tacho.

martes, 18 de agosto de 2009

Mi reino por una moneda


En EEUU realizaron un estudio científico por el cual se detectó que el 90% de los billetes en circulación tenían rastros de cocaína adheridos al papel, ya que la costumbre era la de enrollar el dinero para aspirar la droga. A partir de esta novedad me surgió el deseo de que en Argentina realicen una investigación que lleve como título ¿y donde están las monedas?, porque acá no habrán sustancias tóxicas encaneciendo el cabello de Belgrano o Sarmiento en los billetes nacionales, pero a más de un ciudadano le salen canas verdes mendigando una moneda por la ciudad. Si los bancos nunca disponen de ese vil metal, qué otras alternativas nos quedan para conseguirlo?: lanzarse a rastrear los frascos con los ahorros de la abuela o "asaltar" las alcancías infantiles, negociarlas en el mercado negro, intercambiarlas por un kilo de helado u otro artículo (como ofrecen en algunos comercios), corretear a los naranjitas que las llevan desbordándoles los bolsillos y a las que vigilan con tanto esmero como el que emplean para custodiar los coches estacionados en la vía publica. Qué misterio se esconde detrás de la desaparición de las monedas en una ciudad donde el transporte se paga con tarjetas o cospeles, donde los caramelos son el vuelto corriente si es que antes no te redondean para arriba la cifra a cobrar, y adonde existe una localidad del interior (Devoto) que implementó un bono o ticket en reemplazo de los añorados metales de valor. Tal vez esta faltante se explique por la devaluación que hace que ahora valga más el metal del que están hechas las monedas que el valor nominal que les da el Estado, ya que parece ser mejor negocio fundirlas para luego venderlas transformadas en lingotes de cobre y níquel. Entonces cómo hacer para dejar de transformar a los ciudadanos en desesperados Indianas Jones buscando el santo metal? Podríamos optar por fabricarlas con materiales duros reciclados o como hicieron en México empleando acero inoxidable; o implementar el rediseño del dinero haciendo que los centavos del vuelto sean una variante dentro del mismo “papel moneda”, entonces en vez de $2 se podrían optar por billetes de $2,25 $2,50 o $2,75, por ejemplo. De no buscar una solución, por más disparatada que parezca, de seguro aflorará la viveza criolla haciendo circular monedas de australes o de otros países que se asemejen en tamaño y color a las nuestras. Hoy poy hoy, el sólo hecho de hacer sentir el tintinear de unas monedas en un bolsillo o el escucharla rodar por el piso, podriá ser considerado un acto de provocación que despertaría nuestro lado más salvaje de apropiación. Esta es una cuestión de CARA o CRUZ: encontrar una solución que no resulte CARA y que no convierta este problema en una CRUZ.

jueves, 13 de agosto de 2009

La Casa Encantada


"La casa encantanda" Es un cuento fantástico y anónimo que llevo adherido al alma desde que lo leí como material de estudio en el secundario. Me atrapó por su simpleza, su misterio y el giro inesperado justo sobre la línea final de la historia. Actualmente lo asocio con la película “Los otros” , que a su vez está inspirada en el relato “Casa tomada” de Julio Cortázar. Tanto en el mini-cuento “La casa encantada” como en el film de suspenso “Los otros” nada es lo que parece ser desde un principio, y quien va detrás de la dilucidación de un misterio termina convirtiéndose en el causal del misterio en si mismo:
La casa encantada
Una joven soñó una noche que caminaba por un extraño sendero campesino, que ascendía por una colina boscosa cuya cima estaba coronada por una hermosa casita blanca, rodeada de un jardín. Incapaz de ocultar su placer, llamó a la puerta de la casa, que finalmente fue abierta por un hombre muy, muy anciano, con una larga barba blanca. En el momento en que ella empezaba a hablarle, despertó. Todos los detalles de este sueño permanecieron tan grabados en su memoria, que por espacio de varios días no pudo pensar en otra cosa. Después volvió a tener el mismo sueño en tres noches sucesivas. Y siempre despertaba en el instante en que iba a tener su conversación con el anciano.
Pocas semanas más tarde la joven se dirigía en automóvil a Litchfield, donde se realizaba una fiesta de fin de semana. De pronto tironeó la manga del conductor y le pidió que detuviera el automóvil. Allí, a la derecha del camino pavimentado, estaba el sendero campesino de su sueño.
-Espéreme un momento –suplicó-, y echó a andar por el sendero, con el corazón latiéndole alocadamente. Ya no se sintió sorprendida cuando el caminito subió enroscándose hasta la cima de la boscosa colina y la dejó ante la casa cuyos detalles recordaba ahora con tanta precisión. El mismo anciano del sueño respondió a su impaciente llamada.
-Dígame –dijo ella-, ¿se vende esta casa?
-Sí –respondió el hombre-, pero no le aconsejo que la compre. ¡Esta casa, hija mía, está frecuentada por un fantasma!
-Un fantasma –repitió la muchacha-. Santo Dios, ¿y quién es?
-Usted –dijo el anciano y cerró suavemente la puerta.

miércoles, 12 de agosto de 2009

Engancha-2


“Dale, subí la foto a www.canaldoceblog.com.ar/!!!” me alentaban los vecinos que observaban mientras yo buscaba el mejor ángulo para fotografiar eso que llamaba mi atención cada vez que pasaba por allí. Pero de subir la foto a un blog informativo, con qué perfil noticioso contextualizaría esa imagen? Podría rotularla como una advertencia sobre el riesgo que significaba para los transeuntes y autos estacionados el hecho de que dos simil-arbustos se columpiaran, invertidos, desde los cables. O tal vez como denuncia de que grandes ramas estaban “colgadas” de la luz. Cada uno de los que se acercaban aportaban su teoría a la extraña postal, uno decía que debido a la poda de un árbol ubicado a unos metros de allí, las ramas quedaron enganchadas del cableado y que el viento las había alejado. Sin embargo la practicidad que da el sentido común arruina el arte de dejarse impactar por algo inusual y que despierta las conjeturas más curiosas; ¿por qué no imaginar que la imagen serviría para ilustrar un cuento disparatado en el que los arbustos crecen al revés, sujetos a los cables en vez de a la tierra, alimentados sólo por los nutrientes del aire y el sol?. O quizás interpretarlo dentro del marco de una crítica social en el que se demuestre que vivimos en un lugar donde todo parece estar patas para arriba, sin lógica ni sentido y donde faltan explicaciones realistas o satisfactorias? Los cables del tendido eléctrico comienzan a tener protagonismo luego de sufrir siempre la indiferencia de todos, ahora se están convirtiendo en cazadores de objetos: zapatillas, barriletes, claveles del aire, grandes ramajes; lo cual obliga a levantar la vista al cielo para apreciar el nuevo arte urbano que se balancea sobre nuestras cabezas.

lunes, 10 de agosto de 2009

Memorias de madera



























No hagas leña del árbol "caído”, el dicho -en parte- parece ser cumplido en Capilla del Monte, en cuya plaza principal no demolieron un añoso árbol seco sino que lo “pulieron” y lo llenaron de bellas palabras talladas en carteles de madera que se despliegan en párrafos unidos por cadenas. Entre ellas se alcanzan a leer frases como: “La memoria guardará lo que valga la pena”, “la memoria sabe de mí más que yo” “la memoria no pierde lo que merece ser salvado” “Cuidando el Jardín de la memoria”. Hay ciudades que talan árboles para colocar carteles o como una manera de crecer ediliciamente, aquí inmortalizaron un árbol (sin dejar que muera de pie) para homenajear las raices de la memoria y esto es, sin irnos por las ramas, algo realmente digno de recordar.

jueves, 6 de agosto de 2009

Trolebuseando


Los trolebuses cordobeses, o “troles”, pueden ser comparados con especies de mini trenes con un único “vagón”, a veces dos cuando son articulados, es decir unidos con un nexo-acordeón flexible. O también pueden ser modernos tranvías que se colgaron del cielo, independizándose de los rieles incrustados en las calles al enganchar sus dos antenas a los trolley o “rieles colgantes” que muchas veces se sueltan, para disgusto de las trolebuseras que deben calzarse guantes cual mecánicos y poner todo en su lugar, como costureras que enhebran una aguja con paciencia y puntería. El trole también puede ser visto como un colectivo eléctrico ya que cuenta con neumáticos de caucho en vez de las ruedas de acero que tenían los antiguos tranvías.
Este año los “troles” cumplieron 20 años chispeando en el cielo cordobés. Por sus puertas atravesaron muchas historias, como la de un perro callejero que cuando lo vio detenido con la puerta abierta, ingresó por sus escaleras bajas y se instaló al lado de la conductora, como un pasajero más.
Otras veces la emoción de viajar en trole radica en el espíritu de aventura de quien se anima a pararse sobre las movedizas tapas que enmarcan algunos tramos del piso del pasillo, donde el pasajero puede surfear urbanamente rumbo al trabajo; aunque seguramente nunca nadie imaginó la posibilidad de terminar viajando colgado … pero debajo del trole, entre ruedas y engranajes, hasta que finalmente le sucedió a una desafortunada pasajera, quien vivió para contar la historia.
El trole es un transporte ecológico ya que además de no contaminar por no tener escapes, puede generar electricidad a partir de la energía cinética cuando frena o va cuesta abajo en un proceso llamado frenado regenerativo.
Suelen convertirse en un sauna tanto en verano como en invierno, ya que su sistema de calefacción parece no haber dejado de proyectar temperaturas anticongelantes dignas de los fríos rusos de donde son oriundas estas unidades; por lo que sus grandes ventanales estilo asiático suelen empañarse por momentos, dejando la atmósfera envuelta en una neblina vidriada.
Viajar en trole también tiene sus ventajas deportivas, ya que como las conductoras responden a las “señalizaciones” de su humor emocio-psico-hormonal del momento, muchas veces se les da por probar la destreza olímpica de los usuarios que quieren alcanzar al trole cuando éste se encuentra detenido; aún cuando el pasajero “maratonista-esquiva-coches-y-salta-obstáculos” se esfuerce por llegar, siempre lo hace en el preciso instante en que la conductora decide arrancar, sin piedad alguna.
Ahora me pregunto: por qué habrán elegido a las mujeres como operadoras de estas especiales unidades de transporte público? Las posibles hipótesis serían: como una manera de lograr la igualdad de géneros al volante? porque a veces las conductoras sacan chispas como sus coches? Porque las mujeres sabemos andar con las antenas paradas? porque era un transporte seguro al circular dentro de una vía única y dirigida por cables, lo cual disminuiría los accidentes o evitaría cambios de recorridos por distracción o desorientación? por que las seleccionadas son capaces de llevar las “riendas” del tránsito con energía? O por que es más socialmente aceptado que sea la mujer quien lleve ciertas “extensiones” sobre su cabeza? Sea cual fuere la razón, los troles son un medio de transporte alternativo y distintivo, en el que uno se sigue sintiendo tanto paseante como pasajero.

martes, 4 de agosto de 2009

Afilando la nostalgia


Un vendedor ambulante ingresó al lugar llevando un exhibidor portátil con todo lo que ofrecía a la vista: encendedores, triples, calculadoras y tijeras; al rato escuché de fondo un sonido que me retrotrajo de inmediato a la infancia: el pianillo (flauta de pan) del afilador de tijeras y cuchillos, lo escuché pero no pude verlo: ¿acaso se trataba de un fantasma auditivo de las épocas en que en lugar de vendedores ofreciendo el recambio de lo viejo por lo nuevo, reciclaban hasta el filo de los objetos usados?. Antes se escuchaba esa música precedida de los ladridos de los perros que hacían coro con el paso del afilador en su bici, ahora sólo escuchaba de fondo el ruido del tráfico, y el sonido se iba desvaneciendo en el caos de la concurrida calle, como si fuese diluyéndose en el túnel del tiempo del que parecía haber salido. Este recuerdo sonoro me trajo nostalgias de viejos oficios que van quedando sólo en los pasajes de la memoria, como el del lustrador de zapatos en las veredas, cada vez una imagen más difícil de encontrar y por eso mismo ya resulta una pintoresca postal urbana en peligro de extinción. Otros de los de oficios que cada vez suenan más extraños para las nuevas generaciones son los de modista, zapatero, hielero, sodero, organillero, barriletero y orfebre. Entonces, cómo no emocionarse con el sonido del silbato tipo armónica del afilador, cuando lo escuché fue como descubrir un hallazgo arqueológico importante. Creo que junto al grito de “palito-bombón helado” del otro trabajador del pedal, escuchar la escala musical (de grave a agudo y viceversa) de su flautín -ese como los que solían regalar en las bolsitas de sorpresas de los cumpleaños infantiles- es una manera de afilar la nostalgia con una amoladora color sepia y de querer recortar con las tijeras afiladas un pedacito de historia.